La doctrina invariable de la Iglesia enseña que Jesucristo es, rigurosamente, Hijo de María. A la manera como cualquier madre suministra todo al fruto de sus entrañas, María suministró una naturaleza humana, con la cual se identificó el Verbo; y el fruto fue Jesucristo.
Moviéndonos dentro del alcance y significado del dogma elaborado por la reflexión de la Iglesia a partir de los datos bíblicos y definido por el Concilio de Efeso, María no es tan sólo Madre de Cristo en cuanto hombre, sino también Madre de Jesucristo en cuanto Este es la persona divina del Verbo. Ese es el significado del primer dogma mariano, proclamado con tanto júbilo en Efeso en el año 431. El Verbo es su Hijo y María es Su Madre, lo mismo que las otras madres lo son de la persona completa.
En hipótesis, el Verbo pudo haberse encarnado, por ejemplo, identificándose consustancialmente, en un momento determinado, con una persona adulta. Pero, de hecho, no aconteció así. Según la verdad revelada, Dios entró en la humanidad por el cauce normal de un proceso biológico, a partir de las primeras fases del embrión humano.
Por eso se habla de la maternidad divina. Por eso, también Isabel se pregunta estupefacta. ¿Qué es esto? ¿"La madre de mi Señor" aquí? San Pablo, hablando del Eterno Jesucristo, dice que fue "fabricado" en el seno de una mujer (Gál 4,4), y utiliza una vigorosa expresión_ Nacido "según la carne" (Rom 1,2). Y el ángel de la anunciación, al hablar a María sobre la identidad de aquel que florecería en su seno, dice que se trata del "Hijo del Altísimo".
Moviéndonos dentro del alcance y significado del dogma elaborado por la reflexión de la Iglesia a partir de los datos bíblicos y definido por el Concilio de Efeso, María no es tan sólo Madre de Cristo en cuanto hombre, sino también Madre de Jesucristo en cuanto Este es la persona divina del Verbo. Ese es el significado del primer dogma mariano, proclamado con tanto júbilo en Efeso en el año 431. El Verbo es su Hijo y María es Su Madre, lo mismo que las otras madres lo son de la persona completa.
En hipótesis, el Verbo pudo haberse encarnado, por ejemplo, identificándose consustancialmente, en un momento determinado, con una persona adulta. Pero, de hecho, no aconteció así. Según la verdad revelada, Dios entró en la humanidad por el cauce normal de un proceso biológico, a partir de las primeras fases del embrión humano.
Por eso se habla de la maternidad divina. Por eso, también Isabel se pregunta estupefacta. ¿Qué es esto? ¿"La madre de mi Señor" aquí? San Pablo, hablando del Eterno Jesucristo, dice que fue "fabricado" en el seno de una mujer (Gál 4,4), y utiliza una vigorosa expresión_ Nacido "según la carne" (Rom 1,2). Y el ángel de la anunciación, al hablar a María sobre la identidad de aquel que florecería en su seno, dice que se trata del "Hijo del Altísimo".